¿Y si el viaje en el tiempo se nos permitiera en nuestro propio cuerpo y para darnos una segunda oportunidad? Esta vez no para modificar los hechos presentes sino para aprovechar nuestra juventud con la experiencia y conocimientos ganados con los años. ¿Volveríamos a enamorarnos de quien nos enamoramos? ¿Volveríamos a rechazar a gente motivados por nuestros, entonces, estúpidos prejuicios? ¿Nos tomaríamos el tiempo suficiente para dedicarle el tiempo suficiente a nuestra familia sabiendo que es su amor lo más importante e incondicional? ¿Haríamos quizá algo aventurado pero que por aquella época no nos pareció lo correcto o fue solo por temor al qué dirían? A Peggy Sue le ocurrió.
En el año 1985, Francis Ford Coppola recibió esta película de encargo. Por aquel entonces necesitaba dinero, el vil metal, caso contrario el edificio Sentinel, sede del Zoetrope, tenía que venderse. La remuneración recibida por Rip Van Winkle y Captain Eo no fueron suficientes y esperaba que con esta fantasía podría equilibrar su finanzas, eso sí, el guión original fue modificado pues mientras Kathleen Turner terminaba de filmar "La joya del Nilo (1985)", Francis convirtió una comedia ligera en un estudio sobre el paso del tiempo, la familia, el amor y la nostalgia.
Peggy Sue es una mujer cuarentona en proceso de divorcio con su esposo Charlie, novios desde la secundaria e involucrados en un matrimonio rutinario donde él ha optado por ser infiel. Se celebran los 25 años de graduación del cole e igual que hace cuarto de siglo ella es coronada reina, sin embargo sufre un desmayo y al despertar se encuentra que ha vuelto en el tiempo.
El éxito de Regreso al futuro el año anterior eclipsó totalmente a este filme. No es por criticar el filme de Robert Zemeckis, que es excepcional por más de una razón, sin embargo toda la atención se volcó a las aventuras de Marty McFly y casi nadie reparó en esta historia a pesar que tuvo 3 nominaciones al Óscar incluyendo a mejor actriz. Peggy Sue se casó, es algo así como un híbrido entre una fábula y una parábola, no importa si el espectador no se cree lo del viaje al pasado porque muy bien puede ser un ensueño de la protagonista y lo que acontece pueden ser solo los deseos de ella para alterar un presente sin futuro. Las escenas de los años 60 donde fue feliz son filmadas con mucho brillo especialmente la visita a la casa de sus abuelos, aquel reencuentro la emociona (y creo que a nosotros por igual) al punto de las lágrimas. Peggy Sue sabe que un día los perdió pero es en esta escena de recuperación donde se da cuenta que las cosas pueden ir por otro sendero y rechazará al bobalicón de su actual marido (estrella musical de pueblo), hará amistad con el nerd de su clase pues él puede admitir la posibilidad de que ella venga de otro tiempo y se dará el gusto de tener una noche de pasión con el rebelde que algún día le dedicará un poema agradeciéndole una noche maravillosa. No obstante y para recordar la marca de fábrica, Coppola insistirá en los valores de familia, lo cual también incluye un desenlace donde la aceptación se levanta sobre el conformismo.
Pues Charlie (Nicholas Cage, antes que se crea superstar) tampoco es que aceptará fácilmente que su amada se le vaya y luchará por ella, cosa que recordará a Peggy Sue que hubo un instante en el cual ella lo amó con locura, que es cierto que la vida te lleva a dónde menos te esperas, pero que es uno mismo quien permite que las cosas sean así porque si no luchas por lo que quieres y dejas que sean las circunstancias las que dominen tu destino, entonces ¿para qué vives?
Hay una escena muy divertida en la cual podemos ver la determinación del novio por mantener su relación. El abuelo de la muchacha, masón perteneciente a una logia presuntamente fundada por un viajero del tiempo, organiza una ceremonia para devolverla a su época y en medio de la tormenta se va la luz, circunstancia que aprovecha el chico para secuestrar a su pretendida aunque los otros piensen que tuvieron éxito y se van a celebrar. Charlie ha decidido quedarse con ella y aquello provoca que Peggy Sue se replantee su situación.
Una película “menor” del gran Coppola, pero sigue siendo del gran maestro a pesar de lo edulcorada que pudiera parecer a primera vista. Peggy Sue se casó y bien diríamos que si el matrimonio no funciona para qué continuar con una farsa, no obstante no es el contrato matrimonial lo que perdura sino el vínculo emocional y afectivo lo que conduce a una reinvención de una relación agotada pero todavía viva.
Título original: Peggy Sue Got Married.
Director: Francis Ford Coppola.
Intérpretes: Kathleen Turner, Nicolas Cage, Barry Miller, Helen Hunt, Jim Carrey, Joan Allen, Catherine Hicks, Kevin J. O'Connor, Lisa Jane Persky,
Trailer:
B.S.O.:
Reseña escrita por Carlos Fernando Carrión Quezada
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